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Eduardo Sánchez Morrondo, presidente CAXXI

Publicado en la revista Vivir Asturias nº 16 Agosto/2021

Estamos siendo testigos de uno de esos momentos clave en la historia de nuestro planeta, y sin olvidar (como espero nunca sea el caso) el enorme sufrimiento de muchas personas, no puedo menos que calificarlo de apasionante.
Caracterizar lo que está siendo el sigilo XXI no es fácil ya que hay muchos hitos clave, el euro, la globalización, los cambios de influencias en la geo estrategia mundial, etc pero yo creo que hay 3 temas que han o están suponiendo cambios fundamentales en la sociedad: Digitalización, Crisis financiera del 2008 y Efecto Covid 19. Y la pregunta que me lleva al título de este artículo es que debemos de hacer en Asturias para salir fortalecidos de esta situación y convertir a nuestra querida región en un lugar de excelencia para vivir?
Antes de responder, déjenme que ponga de manifiesto dos detalles que desde hace años, pero que en particular ahora, cuando se oye hablar de Asturias siempre salen a relucir.Hemos sido desde el siglo pasado una sociedad bipolar desde el punto de vista de aspiraciones ocupacionales, por una una parte dirigida hacia las grandes industrias minera y siderúrgica y por otra a los servicios (públicos) y algunos privados con poca iniciativa de creación empresarial. Y en este siglo, hemos aumentado notablemente la edad media de los habitantes permanentes, la generación de rentas por trabajo ha disminuido considerablemente y dependemos cada vez más de las ayudas públicas. Nuestra gente joven se está yendo fuera de Asturias Según lo anterior parecería que nuestro atractivo como región para vivir es cuanto menos limitado, pero si ponemos el foco en lo que yo suelo llamar la media botella llena, nos encontramos con lo siguiente:
Somos una región valorada más positivamente en el exterior que en nuestra propia casa, como lo demuestran las numerosas estadísticas.
Tenemos un entorno medioambiental que en estos momentos en los que la sostenibilidad es un valor fundamental representa una referencia a nivel mundial.
Tenemos una necesidad de retención y atracción de talento que podemos convertir en virtud, (es en los momentos más complejos cuando aparecen las soluciones más creativas).
Nuestra calidad de vida es de sobra conocida, gastronómicamente, con la naturaleza paradisiaca, con un carácter que es envidiable, arte, historia, y cultura para no aburrirse. Y más..
Entonces si ahora volvemos a los 3 grandes cambios que mencionaba antes en este siglo, igual encontramos las claves para poner en valor lo que  tenemos y cambiando algunas cosas, proclamar que somos una “Asturias para Vivir”.
· La digitalización, hace que cualquier lugar en el mundo sea susceptible para trabajar, solo es cuestión de conexión.
· La creación de entornos de networking hace que las capacidades de emprendimiento sean hoy una realidad no ligadas a un territorio.
· La crisis del 2008, fundamentalmente económica ha igualado a muchas regiones y por lo tanto las deficiencias históricas se han minimizado.
· La crisis del covid 19, ha puesto en marcha el mayor dispositivo de incentivos económicos que el mundo hay hecho mucho mayor que después de las guerras del siglo XX, hay dinero para permítanme la expresión para aburrir.
Hemos sido en determinados momentos un ejemplo mundial de cómo manejar esta crisis desde el punto de vista sanitario, somos la región que más rápido ha vacunado.
· Nuestro talento sigue exportándose y comportándose como un referente en muchos de los sectores de actividad, (salud, gastronomía, tecnología, infraestructuras, cultura, entre otros), así que formamos muy bien a la juventud.
Así que permítanme concluir este primer artículo en “VivirAsturias” con algunas sugerencias.
Debemos de incentivar el pensamiento positivo dentro y fuera de Asturias, pero mucho más dentro. 
Seria interesante analizar y evitar ese cainismo que en algunos entornos se destila en nuestra región. Sin entrar en un optimismo absurdo, sería aconsejable y nada difícil, difundir esos aspectos positivos que tenemos.
Trabajar en una educación de valores y excelencia sigue siendo fundamental.
Potenciar el papel de la sociedad civil organizada, (alguien podría  interpretar esto como, ahora va a hablar de su libro) y es verdad, pero es algo novedoso y fundamental.
Les aseguro que nos hace falta muy poco para creernos y que los demás se convenzan de que tenemos. Una Asturias para Vivir…

Eduardo Sánchez Morrondo