Dentro de todos los diferentes análisis que actualmente están encima de la mesa, así como en los distintos estudios que se manejan por los diversos entes públicos y privados, no debemos de dejar pasar la oportunidad de hablar de manera interrelacionada entre el objetivo de constituir la llamada Área Central Metropolitana de Asturias (Oviedo, Gijón, Avilés, Siero, Llanera, Langreo y Mieres) donde se agrupa el 80% de la población asturiana, con las oportunidades que se deberían derivar de dicho proceso de integración, y de manera más concreta con afección a la oferta educativa y con la movilidad que generaría este esquema interurbano con unas intercomunicaciones bien organizadas entre las diferentes zonas y los centros educativos.
La adecuada interconexión entre todas estas ciudades conllevaría las mejoras de la movilidad sostenible donde una adecuada y óptima red de trenes (FEVE y Cercanías), junto con otros servicios de transporte colectivo, contribuiría a facilitar la movilidad de los estudiantes, produciendo un incremento en la demanda de plazas en lugares que actualmente demoran horas en el desplazamiento, haciendo que algunos jóvenes no vean posibilidades dados los tiempos de traslados y los costes de los desplazamientos.
Una red óptima de interconexión ferroviaria eléctrica sostenible y renovable, empezando por FEVE, con el eje Langreo-Gijón-Avilés, y con el otro eje de Gijón-Oviedo-Mieres en el Cercanías, posibilitaría que estudiantes de estas áreas se podrían mover a diario para poder estudiar tanto en la Universidad como en los Centros de Formación Profesional.
Una mejora en la oferta educativa debería ir ligada a una oferta de movilidad sostenible. La creación de nuevas oportunidades donde los tiempos y costes se optimizasen, no deberían afectar a que no hubiese razón alguna para no poder optar a los estudios deseados allí donde se impartiesen independientemente del lugar donde se vayan a cursar. El estudio de las líneas entre los diferentes puntos deberá plantearse de manera que haya rutas largas entre puntos extremos y con rutas cortas entre otros nodos intermedios de manera que se optimicen los tiempos de desplazamiento y el coste del transporte.
El incremento en la demanda de empleo en puesto de técnicos de nivel medio, así como el aumento de estudiantes en la FP hace necesario que se analicen los actuales datos de movilidad y se aprovechen las oportunidades que generan este modelo de centralidad interurbana.
Sin duda el reto está en ofrecer oportunidades que generen estímulo y confianza dentro del actual panorama. El actual modelo de una sola línea ferroviaria de ida y vuelta que circula de un punto extremo a otro no se muestra como el más óptimo, si se piensa en zonas que actualmente no gozan de buena interconexión entre ellas, por lo que surge la necesidad de crear un sistema que sea ágil y óptimo.
El análisis del movimiento diario de estudiantes, que van de un lugar a un centro de estudios debe de facilitar el planteamiento de cubrir los traslados de manera sostenible.
La Universidad y la Cátedra «Milla del Conocimiento»; deben de hacer un estudio en este tema, aportar un análisis de la movilidad de los estudiantes, e innovar un sistema de aprovechamiento de la red ferroviaria de acorde al siglo XXI donde la tecnología permita desarrollar un sistema de movilidad bien con vehículos ligeros monorraíl eléctricos o electro-magnéticos, sean monoplaza o biplaza, pero versátiles, dinámicos y polivalentes para poder ser usados sobre vía y en carretera, buscando el máximo aprovechamiento del sistema ferroviario y la informática de máxima eficiencia, integración y funcionalidad. Lo mismo que un gran almacén se puede robotizar, un sistema de líneas ferroviarias también.
La era de la Industria 4.0, el internet de las cosas, la interconectividad del ciudadano, etc., no solo deben ser planteamientos de grandes ideas, sino que deben ser ideas de desarrollo en el ámbito de la investigación universitaria y del sector empresarial.
El coste, obviamente, también es un factor a estudiar, y hay que pensar si unos sistemas de líneas ferroviarias tienen la misma inversión que un sistema de carreteras en cuanto a desgaste y mantenimiento, teniendo en cuenta la existencia de las propias vías.
Y sin duda, los diferentes ayuntamientos a través de sus Concejalías de Movilidad y Sostenibilidad deberán desarrollar un plan integral que impulse un modelo de movilidad diferente al actual que sigue primando el transporte por carretera en detrimento de un modelo innovador que descongestione las autovías, tal como sucede con la Y.
Cuantificar el coste que requiere una ampliación de la autovía a tres carriles, con el fin de aumentar más aún el número de vehículos, es necesario antes de optar por dicha inversión, habiendo, tal vez, alternativas menos costosas, más innovadoras y que supondría diversificar el modelo de movilidad.
Se debe observar que, dando mayor uso al sistema de vías ferroviarias, actualmente infrautilizado, se conseguiría ponerse a la vanguardia en movilidad y sostenibilidad.
MIGUEL COMINO LÓPEZ
Ingeniería mecánica. QA/QC Site Manager ACCIONA. Chile.
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